“Es un día histórico para las milongas de la Ciudad de Buenos Aires”, dijeron desde la Asociación de Organizadores de Milongas (AOM) tras conocerse la aprobación por parte de la Legislatura porteña de lo que se conoce como la Ley de Fomento a la Milonga.

“Sabemos que nos queda mucho por recorrer pero también sabemos todo lo que hicimos, hacemos y haremos por los templos del tango que son las milongas, donde se reúnen músicos, bailarines, coreógrafos, artistas plásticos, fotógrafos, escritores, vecinos, para tener un lugar de pertenencia”, agregaron desde la AOM que junto a otras organizaciones culturales comenzaron hace un año a trabajar la posibilidad de un proyecto que contenga a los espacios de baile tras las diferentes clausuras y los efectos de los recientes tarifazos.

La ley, impulsada en el recinto por la legisladora Andrea Conde, crea un régimen de protección y fomento para las milongas y brinda apoyo financiero a esos espacios a través de un marco similar al que existe en la ciudad con leyes como la de ProTeatro o ProDanza. Tras su aprobación, llegará el momento de la implementación presupuestaria que, según explicó Conde al sitio Tandas Nuevas, es una “discusión que queda por saldar con la cantidad de unidades, de dinero, una discusión más de presupuesto”. La legisladora además explicó que “la idea es que se arme un consejo asesor donde todas las partes estén representadas y que ellas puedan tomar parte con voz, aunque sin voto, para discutir la implementación. Para mí es fundamental la participación de todo el sector. Eso fue de lo más interesante del proceso”.

Con la aprobación de la norma, las milongas tendrán un régimen que permitirá el diseño de programas y líneas de financiamiento destinadas a promover la resolución de problemas específicos del sector junto a subsidios y exenciones. “En un año de tanto retroceso cultural, laboral y económico, conseguimos la primera ley que contempla a la milonga pública y social. Ante la crisis, esta es una lucha ganada entre tantas que vendrán. Es un gran triunfo que trae esperanza para el tango y la cultura popular”, indicaron por su parte Pedro “el Indio” Benavente y Juan Pablo “Jean Pool” Antivero, de las milongas que se llevan adelante en el espacio público.

“Por primera vez una ley supera la barrera de lo declarativo y especifica instrumentos claros para la protección y el fomento del patrimonio cultural de la ciudad. Los puestos de trabajo, así como la actividad económica y los lazos sociales que las milongas dinamizan dejan hoy de estar desamparados”, manifestaron desde el amplio colectivo cultural que impulsó la norma.