“Es imposible creer que quieran ir contra este proyecto” gritó el locutor desde el escenario.  El proyecto en cuestión es el programa de Orquestas Infantiles y Juveniles de la Ciudad de Buenos Aires, que dirige desde hace 16 años el pianista Claudio Espector. Lejos de cumplir con la rimbombante promesa electoral de fundar 50 orquestas juveniles, el gobierno de Mauricio Macri comenzó, según denuncian los docentes, a aplicar medidas que tienden a vaciar el proyecto.

Por un lado, el Ministerio de Educación porteño dispuso el cierre de las 10 pre-orquestas de cuerdas que inauguraron el año pasado y no renovó contratos de 6 docentes que pertenecen a la Planta Orgánica del Programa Orquestas Infantiles. El resto del plantel docente seleccionado para las pre-orquestas mantendrá contratos precarios hasta fin de año. Por otro lado, algunos de los docentes fueron desplazados para formar parte del proyecto paralelo de tango que está organizando el GCBA, del que se desconoce su orientación pedagógica,  el presupuesto asignado y las condiciones de funcionamiento.

Mientras tanto, se cumplieron dos años desde que el gobierno quitó el subsidio a las cooperadoras de las orquestas para centralizar las tareas que desarrollaban, entre ellas, la reparación de los instrumentos. “Desde que se arrogaron esa tarea, no tuvimos más reparaciones de instrumentos y cuando se llevaron tres flautas para arreglar, nos las devolvieron con un retraso insólito y con un solo instrumento arreglado” denunció Claudio Espector, director y fundador del proyecto, en Fractura Expuesta Radio Tango.

El gremio UTE (Unión de Trabajadores de la Educación) señaló en un comunicado que “la intervención y la puesta en pie de improvisados proyectos paralelos, no solo agrede y vulnera la probada experiencia pedagógica del proyecto, sino que también lo hace con los derechos de los trabajadores, y el desvío de fondos que le correspondían al programa”. En la actualidad, 1800 alumnos  forman parte del proyecto a través de 16 orquestas distribuidas en 12 sedes ubicadas en los barrios más populares de la ciudad.

Asimismo, UTE indicó que el gobierno está sometiendo al programa de orquestas a una “reducción objetiva del patrimonio instrumental, que cuenta con 400 instrumentos inutilizables o pendientes de reparación, vaciamiento denunciado desde 2012 cuando recortaron subsidios para la compra y reparación de instrumentos y material pedagógico.

La delegada Adriana Weschler anunció que “más de 35 mil personas firmaron el petitorio, para que Macri deje de hacerse el sordo”, al tiempo que remarcó los valores inclusivos del proyecto que  “siempre estuvo en la escuela pública, en la defensa de lo pedagógico de más alta jerarquía”.