La orquesta que armó a su medida el genial Agustín Guerrero acaba de lanzar su esperado segundo disco.

El libro que acompaña el material explica: “XXI es memoria, realidad y porvenir”. Tal es la idea plasmada en la búsqueda renovada de la orquesta, que tras su primer disco, “Resurgimiento,” sale con 9 piezas que proponen una diversidad sonora y novedosa a nivel compositivo. Su repertorio incluye, en su mayoría, composiciones de su director, obras de autores contemporáneos y arreglos propios de la orquesta.

La formación instrumental tiene una sólida base de cuerdas con cuatro violines, viola, violonchello, contrabajo, dos bandoneones, guitarra, flauta, y piano a cargo de Anabel Loza Subia. Agustín toca el piano solo en «Bailongo» y «Tango laberinto». Es que Guerrero es el director de la orquesta, y suele plantarse frente al escenario a indicar las entradas y las intensidades de sus dirigidos. En XXI también ejecutó los sintetizadores en la versión de «Globalización», obra del pianista Fernando Otero.

El disco cuenta con una interesante nómina de músicos invitados: Pablo Agri, violín solista,en «Bailango»; Florencia Barrientos, percusión en «Aire de Tango»; Santiago Pedernera, clarinete en «Milonguita»; Néstor Ibarra, bandoneón en «Tango Laberinto», y Lucas Diego, batería en «Tango Laberinto» y «Globalización».

El tema que abre el disco dura nueve minutos y lo hace con un piano tocado a cuatro manos, ya que Loza Subia y Guerrero exprimen el mismo teclado, en simultáneo.

Escuchá XXI, de y por la Orquesta Típica Agustín Guerrero